Escrito por LlanAUGC 27-11-2019
Por Alberto Llana
El espectáculo que está ofreciendo Félix Azón al frente de la Guardia Civil, desde poco después de aceptar ser el Director General del Cuerpo y acentuado en los últimos tiempos, resulta penoso. Uno podría sentirse tentado de tener lástima por él si la única referencia que tienes del personaje son las imágenes que puedes encontrar en redes sociales, dado que ofrece cierto aspecto bonachón, pero como suele ocurrir a menudo, la primera visión engaña, y mucho. Escasos días después de llegar al cargo, a finales de junio de 2018, ya dio muestras de su carácter desaforado intentando aprobar una norma interna sobre el aspecto que deben tener los miembros del Cuerpo, que si bien había heredado de su antecesor, la acogió con entusiasmo desbordante e intentó sacar adelante pese a la gran oposición interna que se encontró. Tras un verano caliente en ese aspecto, a principios de septiembre el ministro del Interior ordenó aparcar el proyecto, aunque no sabemos hasta cuando porque de seguro que volverán a la carga en el futuro. Tras esta primera experiencia, cualquier atisbo de buenas intenciones mostradas por Azón cuando asumió tan alta responsabilidad se esfumó.-
Encontró pronto la forma de vengarse, y lo hizo a través de las nóminas de los agentes. Precisamente en el mes de septiembre antes referido acordó con los representantes de los guardiaciviles respetar el porcentaje de reparto monetario establecido para el primer tramo 'equiparador' de los tres que conforman el Acuerdo salarial firmado en marzo de 2018. Recordemos que, de las cantidades globales estipuladas para la Guardia Civil y la Policía Nacional en cada uno de los tramos, el 59% correspondería a la Benemérita y el 41% a la Policía, atendiendo a los efectivos de cada Cuerpo. El resultado final lo conocen bien los afectados. Azón decidió unilateralmente (recordemos que se autoproclama representante de todos los guardias), ceder generosamente más de cuatro millones de euros con destino a los compañeros de la Policía Nacional. Felicidades por la gestión a los sindicatos policiales y a su Director General y tirón de orejas a Azón por su dejadez, la cual, como he indicado, me huele a desquite. Atentos al tercer tramo porque no pinta nada bien.-
Lo mismo ocurrió poco después con el tema de los destinos. Tras la anulación por parte del Tribunal Supremo del nuevo real decreto aprobado en época de Arsenio de Mesa, el primer desquite de este sujeto, imagino que alentado por los enfajinados, fue suprimir un anuncio de vacantes publicado pocos días antes, con la excusa de que si no había norma, no se podía adjudicar destino alguno, mintiendo con descaro y de manera inaceptable en un magistrado en excedencia. Era sabedor que esos destinos anunciados bien podrían haberse resuelto conforme a la norma que había derogado el real decreto anulado por el Supremo, que recobraba su vigencia tras el esperado final de una normativa que, como advirtió la AUGC desde su fase de tramitación, no era legal. Es más, Azón incumplió a sabiendas el precepto que obliga a la Guardia Civil a publicar al menos una vez cada seis meses las vacantes ya producidas, así como las que se prevea vayan a producirse en los dos meses siguientes a la fecha de publicación del anuncio de vacantes. Y para más inri intentó culpar a la AUGC de esa situación por haber recurrido una norma que se demostró ilegal. Para ser juez, su sentido de la justicia parece estar en paradero desconocido. No contento con lo anterior, volvieron a la carga con un nuevo real decreto de destinos del mismo tenor que el suprimido pero con ciertos retoques en espera que esta vez el Tribunal Supremo lo convalide porque AUGC ha vuelto a recurrirlo. Por si las moscas, Azón ha comenzado a aplicar sin piedad la parte del reglamento referida al personal con limitaciones psicofísicas cesando por las buenas a cientos de guardiaciviles, dejándolos sin un complemento monetario que ronda los 500 euros o más, dependiendo de cada caso concreto, sin pabellón oficial a aquellos que lo tenían adjudicado y sin visos de obtener nuevo destino hasta sabe Dios cuando. Así se las gasta este fulano.-
Respecto a esta última barrabasada que colea todavía, es decir, ese proyecto de real decreto sobre jornada laboral, vacaciones, permisos e incentivos monetarios, Azón se ha lucido. Obsesionado con huir hacia adelante, fustigado por el generalato que se lo debe estar pasando pipa a su costa, apostando sobre cuánto tiempo más podrán seguir toreando a este mamandurrias, el sujeto en cuestión presentó por las buenas a los representantes (los de verdad) de los guardiaciviles el engendro cercenador de derechos con la única posibilidad de presentar alegaciones por escrito en próximas reuniones. Ante el aluvión de críticas cosechadas y el anuncio de serias movilizaciones por parte de casi todas las asociaciones representativas trató de justificarse en un acto público donde quedó patente su falta de tacto y su ignorancia supina acerca del tema. Al margen de cuestiones más técnicas que solo están al alcance de quien las padece, lo que desató definitivamente la tormenta fue la afirmación de que las guardiaciviles embarazadas no perderían gran parte de un complemento dinerario cuando el tenor literal del proyecto indica claramente que eso sería así, de aprobarse la norma. Tal fue la metedura de pata que llegó a salpicar al propio ministro del Interior el cual, supongo que sorprendido por los palos que recibía de los medios de comunicación, intervino en el asunto como ya hiciera con el tema de los tatuajes y demás mencionado anteriormente.-
El caso es que Azón decidió posponer una reunión prevista para el día 11 de diciembre hasta el 23 de enero del próximo año. Pero ni con esas. Viendo que la marejada no se calmaba también optó por suspender el encuentro de enero, no sin antes volver a mostrarnos su verdadero rostro, al irrumpir en una reunión en la que representantes de la Dirección General y de los miembros del Cuerpo abordaban otras cuestiones diferentes, y con sus malos modos habituales aseverar que el borrador de real decreto no se retiraba. Tras ello se publicó en algunos medios unas declaraciones suyas respecto a que, efectivamente, había que replantearse algunas cuestiones pero la idea primigenia no se abandonaba. Como las críticas no cesaron, exigiendo la retirada definitiva del proyecto, finalmente la Dirección General decidió hacerlo, al menos de momento porque, en mi opinión, volveremos a ver en el futuro un intento similar a este dado que la única forma de mantener los actuales privilegios de unos cuantos en la Guardia Civil pasa inexorablemente por abusar del resto sin contemplación alguna... ya sabíais dónde veníais, nos espetarán.-
Explica la RAE que 'sinrazón' es una acción hecha contra justicia y fuera de lo razonable o debido. Aquí he expuesto algunas, que no todas. Y si grave resulta que un señor cuyo padre fue miembros del Cuerpo nos venga con estas sinrazones, tan malo o peor es cuando esas acciones contra justicia vienen precisamente de un juez... o de tres porque tanto Marlaska como Margarita Robles lo son igualmente.-
