Escrito por LlanAUGC 24-11-2019
Por Alberto Llana
El Consejo de Europa (no confundir con el Consejo Europeo) es una organización internacional destinada a promover, mediante la cooperación de los estados de Europa, la configuración de un espacio político y jurídico común en el continente, sustentado sobre los valores de la democracia, los derechos humanos y el Imperio de la ley. Dentro de ese Consejo existe un órgano denominado GRECO (GRupo de Estados contra la COrrupción), compuesto por los 47 países miembros del Consejo de Europa, además de Estados Unidos y Bielorrusia, que realiza desde 2001 evaluaciones periódicas para calibrar la lucha contra la corrupción en cada uno de los Estados miembros y emite recomendaciones en aras a mejorar la transparencia y la confianza de los ciudadanos en las instituciones. En lo referente a España, miembro del Consejo de Europa y uno de los países fundadores del GRECO allá por el año 1999, ha sido evaluada en varias ocasiones, obteniendo malos resultados hasta hace poco. Efectivamente, en el informe emitido por GRECO en junio de este año, dentro de la quinta ronda de evaluación, por fin nuestro país ha dejado de ser calificado como “globalmente insatisfactorio”, saliendo del mecanismo de supervisión periódica en el que estaba desde 2016, al considerar 'cumplidas' o 'parcialmente cumplidas' 10 de las 11 recomendaciones efectuadas en el informe de evaluación de 2013, aunque queda mucho camino por recorrer todavía.-
En lo que atañe a este comentario, que es lo relacionado con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, este último informe de junio destaca que la Guardia Civil y la Policía Nacional generan gran confianza entre la población española reseñando que: “Existen numerosos procesos internos y buenas prácticas en ambas que protegen y dan seguridad a los ciudadanos a los que sirven. Reconocido lo anterior, se necesitan mejoras adicionales en tres áreas principales: la prevención y la mejora continua, la transparencia y la legitimidad y, por último, la protección de los denunciantes”. Más adelante se concreta que “es fundamental comprender las cuestiones más preocupantes y las vulnerabilidades con el fin de poner en práctica medidas de control que contrarresten comportamientos o prácticas indebidos, que pueden ir desde un error de buena fe, a menudo causado por la falta de conocimiento, a verdaderas prácticas corruptas (...) el EEG (Equipo de Evaluación del GRECO) no pudo identificar ninguna evaluación estratégica que identifique temas claves sobre vulnerabilidad a nivel nacional. Sin un enfoque nacional sobre desafíos clave como, por ejemplo, la venta de información policial o el abuso de autoridad en beneficio personal (...) ni la Policía ni la Guardia Civil están aprovechando al máximo la oportunidad de definir los riesgos y, por tanto, pueden ser más vulnerables a un comportamiento inmoral o incluso corrupto. (…) A este respecto, el EEG no pudo encontrar pruebas de la existencia de una estrategia de prevención específica en ninguna de ambas instituciones, lo que pone en entredicho la capacidad real de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad para predecir o analizar las tendencias que se desprenden tanto de las quejas de los ciudadanos como de malas prácticas internas”.-
Es por ello que el GRECO “recomienda que la Policía y la Guardia Civil i) lleven a cabo una evaluación estratégica de los riesgos existentes en áreas y actividades proclives a la corrupción con el fin de detectar problemas y amenazas emergentes, y ii) los datos recabados se utilicen para el diseño proactivo de una estrategia en materia de integridad y lucha contra la corrupción. Sería preferible que ambas instituciones se consultaran mutuamente en el marco de estas iniciativas”. Y concreta más aún cuando señala que: “La Policía elaboró, en 2013, su propio código de conducta, que sigue de cerca los estándares internacionales en ese sentido y, especialmente, el Código Europeo de Ética de la Policía. El EEG considera que es verdaderamente importante definir el tono y las normas de comportamiento que se esperan de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. Por este motivo, el hecho de que la Policía haya desarrollado su propio código es una buena práctica”. Una clara invitación a la Benemérita, que sigue a lo suyo, considerando suficiente la aplicación, con ciertas limitaciones, de las Reales Ordenanzas para las Fuerzas Armadas (?) y la Cartilla del Guardia Civil. No obstante, el informe destaca que el Cuerpo “confirmó, in situ, que están elaborando su propio código, que tienen intención de completarlo con directrices y otras medidas prácticas para contribuir a evitar comportamientos contrarios a la ética”. Como bien apunta el repetido informe “Se trata de una evolución positiva que debe materializarse en la práctica”. Ya se verá en qué acaba finalmente esta, por ahora, declaración de intenciones.-
En el apartado disciplinario, se resalta que “debido a la naturaleza militar de la Guardia Civil, sus sanciones disciplinarias son especialmente severas; también debido a que los representantes del personal (asociaciones profesionales) no desempeñan un papel tan activo como sus homólogos de la Policía (sindicatos que llevan el caso al Consejo de la Policía). Los representantes del personal coincidieron en que la utilización de tribunales militares para procedimientos disciplinarios y penales contra agentes de la Guardia Civil realizando funciones policiales es un remanente del pasado que debe ser revisado y remplazado”. Por lo que el GRECO “recomienda revisar el régimen disciplinario de la Policía y de la Guardia Civil, con el fin de reforzar su transparencia, objetividad y proporcionalidad, entre otras cosas y, especialmente, para excluir la posibilidad de que un superior jerárquico decida unilateralmente sobre cuestiones disciplinarias”.-
Relativo a la formación del personal, el dictamen del GRECO señala que “los agentes tienen la posibilidad de realizar cursos de actualización sobre deontología profesional (…) No se dispone de registros sobre el número (y el empleo) de los agentes que asisten a dichos cursos, pero el EEG tuvo conocimiento de que los mandos superiores rara vez acuden a los cursos sobre integridad y ética. El EEG considera crucial, dado que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad se basan en estructuras jerárquicas, que los mandos sean los primeros en dar ejemplo”. Importante también lo que se apunta sobre la posibilidad de que los agentes de los cuerpos de seguridad puedan tener un “asesoramiento externo, neutral y confidencial sobre cuestiones éticas y de integridad (...) El EEG opina que sería más apropiado que un órgano experto en la materia o personas sin contacto diario con los agentes fueran responsables de proporcionar asesoramiento confidencial a los agentes que tengan un dilema ético”. Por todo lo anterior, el GRECO que: “i) la Guardia Civil adopte un código de conducta y lo haga público; ii) tanto la Policía Nacional como la Guardia Civil complementen sus respectivos códigos mediante directrices y medidas prácticas de aplicación (...), así como con un mecanismo creíble y eficaz de supervisión y ejecución”.-
En referencia a los destinos 'a dedo' (libre designación), el informe resulta demoledor para la Benemérita. Así, se indica que “La libre designación se reserva para determinados puestos directivos o para aquellos que requieren un especial grado de confianza o de responsabilidad. La posibilidad de recurrir a la libre designación es común a toda la función pública (...), y no es exclusiva de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. Este método particular de asignación de destino asciende a alrededor del 4 % en la Policía (2.824 puestos) y al 12 % en la Guardia Civil (10.147 puestos)”. Realmente alarmante tal diferencia porcentual entre los dos cuerpos. En ese sentido “El GRECO recomienda que la Policía y la Guardia Civil revisen sus procesos internos relacionados con la carrera profesional (selección y acceso, ascensos, libre designación, sistemas de evaluación/méritos) con el único objetivo de identificar oportunidades para mejorar el registro y la publicación de la fundamentación de las decisiones, a fin de establecer un enfoque más objetivo y transparente. Al revisar estos procesos, debe prestarse especial atención a la integración de las mujeres en todos los niveles de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad”, dado que “España tiene un bajo porcentaje de mujeres en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado”.-
En el apartado relacionado con las condecoraciones, el memorando refleja su preocupación al respecto: “Una cuestión problemática planteada in situ se refiere a las decisiones sobre la concesión de medallas y condecoraciones. Durante la visita se mencionó el caso concreto de las denominadas medallas con distintivo rojo. Estas medallas no solo constituyen un título honorífico, sino que también suponen una recompensa económica mientras se están en activo y un aumento de alrededor de un 10 % en la pensión de jubilación durante toda la vida. De 2016 a 2018, se han concedido un total de 510 y 197 medallas con distintivo rojo en la Policía y la Guardia Civil, respectivamente”, recomendando: “i) revisar los criterios y procedimientos para la concesión y retirada de complementos, primas y otros beneficios, promoviendo así la transparencia, la coherencia y la justicia en su aplicación, y (ii) introducir controles y seguimientos adecuados en este ámbito”.-
Destaco un párrafo del informe relativo a las organizaciones sindicales y asociaciones profesionales existentes en ambas instituciones y el respaldo explícito a su labor: “La Policía tiene ocho sindicatos y la Guardia Civil cuenta con 13 asociaciones profesionales (...) Estas organizaciones desempeñan un papel esencial en la negociación de asuntos de interés general relativos a la situación jurídica de los agentes y sus condiciones de trabajo. Su acción ha demostrado ser fundamental para proteger y luchar por los derechos de los agentes en los momentos críticos de acceso, promoción y despido. Por otra parte, los agentes también recurren en muchos casos a sus representantes sindicales o profesionales en busca de asesoramiento”.-
Este informe, que genéricamente analiza la prevención de la corrupción y promoción de la integridad en Gobiernos centrales (altas funciones ejecutivas) y Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, y que cuenta con unas 60 páginas, puede encontrarse en la web https://www.coe.int/en/web/greco
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