Por Alberto Llana
NOTA: Este comentario lo publiqué el 15 de mayo de 2016 y las cosas no han cambiado, o quizás sí, pero para peor... https://www.facebook.com/LlanAUGC/posts/pfbid0eLndjCRoJkPTHsiywqZdL3BhxxZNcocTUENVLRZHPhzC5vhSrXZWKkQT8R6bmAiJl
La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) ha dado a conocer, a través de un vídeo explicativo y diversos gráficos, la disparidad horaria entre la jornada de trabajo de los miembros de la Policía Nacional y de la Guardia Civil. Además de la gran diferencia de los turnos reglados desde hace muchos años para los componentes de la Policía, mientras que en la Benemérita no existen todavía, pese a la obligación normativa que imponía su desarrollo a partir del 30 de marzo pasado, los datos que se desprenden del estudio realizado por AUGC resultan muy esclarecedores acerca de lo que figura como titular de este artículo.-
Empero, en la Guardia Civil, por fin, se han decidido a experimentar sobre diversos modelos de turnicidad, cuasi fija, en varias Unidades del Cuerpo. No está mal la iniciativa tardía, si aplicamos el dicho de más vale tarde que nunca, pero ello no significa que vaya a servir de algo cara al futuro. Porque, de principio, el ensayo se está desarrollando en Unidades con bastante potencial humano, lo cual no es la regla común en los cuarteles beneméritos. Por otro lado, las diferencias en las necesidades del servicio entre esas Unidades son palmarias, a saber: un aeropuerto, un Destacamento de Tráfico, una unidad de seguridad, un centro penitenciario y un Puesto. Lo cual puede derivar muy fácilmente en que una cadencia de turnos, que parezca adecuada tras probarla en una Unidad concreta, se torne en impracticable cuando se extrapola a otra Unidad de diferentes características.-
No resulta nada fácil resolver la ecuación de una turnicidad fija en la Guardia Civil, tornándose en utópica en tanto en cuanto se mantengan las actuales condiciones de escasez de personal, mala gestión de la escasez antedicha y un despliegue territorial inadecuado a los tiempos que corren. Remarcado lo obvio, tampoco puedo dejar de mencionar la gran cantidad de tiempo del que han dispuesto los máximos responsables del Cuerpo, desde que se ha hecho patente la necesidad de una regulación horaria de este tipo, hasta este instante. No han hecho los deberes por la sencilla razón de que no les ha dado la real gana, sabedores de que su negativa, su vagancia o, quizás, su falta de capacidad, no les iba a conllevar reproche alguno. En cualquier caso la situación es la que es y hay que bregar con ella.-
Volviendo al objeto de estas líneas, recordar los datos ofrecidos por la AUGC y que, grosso modo, se pueden resumir en que, de los cinco experimentos que se están llevando a cabo, las diferencias son escandalosas. Mientras que en la Policía Nacional, la media horaria anual se sitúa en unas 1.600 horas, la media benemérita las supera, en tres de los cinco casos, en unas 160. En un caso concreto, la superación es solamente de unas 25 horas de media. Por contra, en el quinto experimento, las cifras se disparan a unas 210 horas de más por año. Simplificando el amasijo de cifras, podría concluir que, por norma general y con los repetidos ensayos como referencia, un Guardia Civil trabajará en diez años lo que un compañero de la Policía en once. Muy revelador, ¿verdad?
La parte anecdótica, que demuestra lo que pueden esperar los guardiaciviles de aquellos responsables de regular esta importante cuestión, la protagonizó un alto oficial del Cuerpo que realiza funciones de abogado del Estado. Este señor, designado para defender los intereses de la Administración en un contencioso sobre jornada laboral en la Benemérita, con el fin argumentar su postura acerca de la imposibilidad de respetar la normativa en vigor, no tuvo mejor ocurrencia que ofrecer a la juez que presidía la Sala de Justicia, un cuadrante de los que se usan normalmente para planificar el servicio, en blanco, invitando a la magistrada a intentar desarrollar una cadencia de servicios que se ajustara a la mencionada norma. Ignoro donde le han regalado a este iluminado el título de Derecho pero, en cualquier caso, lo que debería hacer es dirigirse a la Dirección General y realizar tal encargo a los verdaderos responsables del desaguisado. Y, de paso, recordarles que con una cadencia de turnos fija, a buen seguro no tendría que usar premisas estúpidas para defender lo indefendible.-
Komentarze