Escrito por LlanAUGC 07-03-2019
Por Alberto Llana
Inasequible al desaliento, el Director General de la Guardia Civil sigue demostrando que el cargo le viene demasiado grande. Hace unos días logró cabrear a todas las asociaciones representativas de guardiaciviles tras anunciar que, de motu propio y en nombre de todos sus subordinados, renunciaba al 1% del montante económico previsto para la Benemérita en 2019, como parte del segundo tramo de los tres previstos en el Acuerdo de equiparación firmado en marzo de 2018. Así, por las buenas y sin encomendarse ni a Dios ni al diablo, usando como papel higiénico el acuerdo consignado por él mismo el pasado 5 de septiembre en donde quedaban claros los porcentajes dinerarios que percibirían, tanto la Policía Nacional como la Guardia Civil. Aunque la cosa resulta más grave aún porque lo cierto es que ese porcentaje será mayor, vistas las cantidades anunciadas por el mismo Félix Azón, situándose en lo dicho por el Director General de la Policía Nacional a los sindicatos representativos y que engorda la cifra hasta el 1'72%. Felicidades a los compañeros de la Policía por tener un Director que mira por ellos y nos los deja tirados como colillas a las primeras de cambio.-
Aludí antes a las cantidades anunciadas por el Azón en referencia a una vergonzante misiva que este señor ha dirigido a los agentes del Benemérito Cuerpo. Una epístola electoralista a más no poder en la que aclara las cantidades concretas a percibir por los diferentes Empleos del Instituto y que son una demostración palpable de que el detrimento monetario decidido unilateralmente es superior al 1% anunciado, por lo que resulta creíble ese 1'72% mantenido por su homólogo de la Policía Nacional. Y mantengo que es una vergüenza el mensaje de Félix Azón porque, entre otras cosas, todavía no se ha aprobado la norma que permita añadir ese dinero a las nóminas de los guardiaciviles, no digo ya siquiera discutir su reparto. Resulta cierto que el propio Gobierno anunció hace meses que el cumplimiento de este segundo tramo del Acuerdo estaba a salvo de un posible tropiezo de la Ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) y también que aprobaron un Real Decreto que así lo consignaba, pero por esas mismas razones resulta rechazable la carta enviada por el Director General de la Guardia Civil cuyo único motivo plausible es el de generar un clima propicio de cara a las elecciones generales del 28 de abril, sobre todo si tenemos en cuenta que en esas fechas aproximadas tienen pensado ingresar el montante económico derivado de esa posible subida salarial, con efectos retroactivos desde enero. Una nómina golosa que a muchos les puede hacer repensar su voto... o eso es lo que se piensan determinados políticos del estilo de Azón.-
Y es vergonzante porque se hace pública el mismo día en que entra en vigor el decreto de convocatoria de elecciones y, por tanto, el gobierno pasa a estar en funciones, no vaya a ser que si lo hace a posteriori le afeen aún más el carácter electoralista del comunicado. También lo es por el hecho de ignorar las voces de los guardiaciviles que le han pedido a las puertas de la Dirección General de la Guardia Civil que cumpla con lo rubricado, que discuta con las organizaciones representativas firmantes del Acuerdo la forma de repartir un dinero que todavía esperamos aparezca, que reconozca de una vez por todas que esas organizaciones representativas (firmantes o no del Acuerdo) son portavoces legítimos del colectivo Benemérito y no es aceptable que se les otorgue capacidad negociadora o no en función del interés político del responsable de turno. Con las negociaciones acaecidas en 2018 alrededor de lo que finalmente resulto ser el Acuerdo de Equiparación salarial y las posteriores reuniones de seguimiento de ese Acuerdo, se produjo un reconocimiento tácito de la capacidad negociadora de las asociaciones representativas de guardiaciviles. Un paso adelante que algunos no vieron con buenos ojos y que ahora se aprestan a minimizar de la peor manera posible tal es la de adoptar decisiones personales bajo el falso argumento de que las mentadas organizaciones no tienen reconocida legalmente la posibilidad de negociar. Pues resulta que hay unas cuantas firmas en el Acuerdo de 12 de marzo de 2018 que demuestran lo contrario.-
Este 6 de marzo, los guardiaciviles le han dicho al señor Azón a las puertas de la Dirección General de la Guardia Civil que ya basta de ninguneos, que su breve gestión hasta el momento tiene un balance marcadamente negativo, que ha aceptado una responsabilidad que va mucho más allá del simple hecho de fanfarronear por dirigir el Cuerpo al que perteneció su progenitor, que el proceso de equiparación salarial comenzó con una negociación entre partes en donde hubo mutuos entendimientos y nunca imposiciones unilaterales, del mismo modo que ocurrió con el reparto monetario correspondiente al primer tramo de los tres recogidos en el Acuerdo, al igual que lo acordado en la reunión de la comisión Técnica de Seguimiento de 5 de septiembre pasado. Le han dicho todo eso y más... le han dicho que ya es hora de finiquitar su fugaz presencia entre nosotros, que se vaya por donde vino antes de dañar más la institución que desgraciadamente alguien decidió que dirigiera.-
Y puestos a enviar cartitas a los miembros de la Benemérita, que envíe una donde explique por qué les ha hurtado un porcentaje de sus nóminas, las razones de incumplir lo firmado por él mismo, a dónde van a ir a parar los dineros destinados a incentivar la situación de Reserva con destino, la justificación de por qué los incentivos al rendimiento se han convertido en incentivos a los rendidos, los motivos de enviar una misiva cargada de electoralismo que, a fin de cuentas, no es más que la certificación de su pésimo obrar.-
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